"¿En qué hondonada esconderé mi alma para que no vea tu ausencia que como un sol terrible, sin ocaso, brilla definitiva y despiadada? -Jorge Luis Borges." |
Preocúpate cuando ya no te diga “Te amo”,
cuando estos labios ya no aspiren a alabarte
o a sentenciarte con algún arrebato de mi amor.
cuando estos labios ya no aspiren a alabarte
o a sentenciarte con algún arrebato de mi amor.
Cuando mis lágrimas dejen de brotar de mis ojos
implorando tu presencia en ésta noche oscura.
implorando tu presencia en ésta noche oscura.
Preocúpate cuando mi lealtad ya no sea tuya,
cuando mi mirada se apague ante tu presencia.
cuando mi mirada se apague ante tu presencia.
Quisiera que te preocuparas así como yo lo hago
y que tus manos tiemblen por no tener las mías,
rogando por su desconsuelo y el pesar de los días.
y que tus manos tiemblen por no tener las mías,
rogando por su desconsuelo y el pesar de los días.
Preocúpate cuando ya no le jure al viento
mis palabras para que las lleven a tus oídos;
preocúpate cuando ya no te pertenezcan los roces
que deseaban quemar tu piel desnuda a la mía,
o cuando aquél fuego no reanime a la calidez del mío
cada que posees mi libertad junto a la tuya.
mis palabras para que las lleven a tus oídos;
preocúpate cuando ya no te pertenezcan los roces
que deseaban quemar tu piel desnuda a la mía,
o cuando aquél fuego no reanime a la calidez del mío
cada que posees mi libertad junto a la tuya.
Preocúpate; sí, preocúpate cada noche y cada día
junto con el desconsuelo de mi alma sin la tuya.
junto con el desconsuelo de mi alma sin la tuya.
Preocúpate y limita a sorber la melancolía que escurre
de tus labios por intentar gritar al silencio la agonía
que no transcurre de tus ojos a lo más alejado de tu vida.
de tus labios por intentar gritar al silencio la agonía
que no transcurre de tus ojos a lo más alejado de tu vida.
Preocúpate cuando los atardeceres sólo sean tuyos,
cuando no haya más amaneceres que compaginen
con estos días que transcurren a lo largo del ocaso a mi partida.
Y a mi partida vendrán más, pues a la ausencia de mi presencia
cada rastro depositado en los rincones de tu esencia,
llamarán a mi propio cuerpo, anhelando mi alma a su regreso.
cuando no haya más amaneceres que compaginen
con estos días que transcurren a lo largo del ocaso a mi partida.
Y a mi partida vendrán más, pues a la ausencia de mi presencia
cada rastro depositado en los rincones de tu esencia,
llamarán a mi propio cuerpo, anhelando mi alma a su regreso.
Pues en esta vida todo es ciclo, y los ciclos son lo que son.
Reviviré en ti, aun cuando no quieras.
Pensarás en mí, hagas lo que hagas.
La semilla que dejé en ti ha germinado
y mis recuerdos en ti son el resultado… Aquél árbol.
y mis recuerdos en ti son el resultado… Aquél árbol.
-Weiter Das Kind
No hay comentarios:
Publicar un comentario